El Relleno Sanitario de Ambato está ubicado en Chachoán en la vía a Píllaro, fue abierto hace unos 25 años, en la alcaldía del Dr. Luis Fernando Torres, quien gestionó la compra del predio a la familia Salazar Samaniego, tiene como objetivo el tratamiento y la disposición final de desechos sólidos urbanos, de manera técnica y controlada, para minimizar los riesgos, las afectaciones sociales y los impactos ambientales.
Diana Fiallos, gerente de la empresa municipal Gidsa indicó que hasta mayo de 2022 podría estar en funcionamiento y que luego de ese tiempo se trabajará en el cierre y abandono del relleno sanitario para garantizar la parte ambiental, la clausura final ocurrirá dentro de 30 o 50 años o más, porque el relleno continuará generando metano, biogás y lixiviados.
Jorge Luis Jara, ex gerente de Gidsa indicó a un medio local, que, durante su gestión, ya se inició la consultoría que permita establecer el lugar en el cual se colocará un nuevo espacio. Sostuvo que son seis lugares los que estarían siendo tomados en cuenta dentro de este estudio, además, se prevé que este nuevo relleno tenga una vida útil para no menos de 20 años a partir del momento en que entre en funcionamiento.
Son alrededor de 300 toneladas de desechos que ingresan, de ellas los residuos domiciliarios representan un aproximado de 260 toneladas y los residuos industriales, sanitarios y otros las 40 toneladas restantes.