Habitantes de la parroquias La Península y Huachi Grande, acudieron hasta el Municipio de Ambato, para exponer su malestar por la reubicación de la zona de tolerancia a uno de estos sitios.
Varios moradores aseguran que una zona de tolerancia no solo representa la presencia de las trabajadoras sexuales, también significan problemas como la inseguridad, venta de drogas y otros inconvenientes que perjudicarían al sector a corto plazo.
Irene Morales, presidente del Gobierno Parroquial de Huachi Grande, participó en la sesión del Concejo Municipal y expuso el rechazo a la zona de tolerancia en la Parroquia. De igual manera, se pronunció sobre la afectación del nuevo terminal y las consecuencias que se han ido suscitando.
Por su parte, Santiago Vargas, morador de La Península, manifestó que no permitirán este tipo de espacios y que tomarán medidas más radicales como quemar las zonas de tolerancia si llegan a construirse.
La consultoría realizó los estudios desde el año 2018 y presentó un informe ante Concejo, mismo a través de los 13 concejales tiene la responsabilidad de definir un lugar. Esta decisión es de carácter técnico, por lo que dicha normativa se mantiene en debate y aún no está aprobada.