Los candidatos Luisa González (RC) y Daniel Noboa (ADN) se enfrentaron en el debate presidencial a vísperas de las elecciones de segunda vuelta. En el debate se abordaron cuatro ejes: económico, seguridad, política y asuntos sociales, siendo la seguridad el eje que marcaría gran parte de los proyectos presidenciales de los candidatos.
En este tema, González arrancó prometiendo 500 millones de dólares para fortalecer a la Policía y apuntalar el control de las prisiones, así como de los aeropuertos y los puertos como vías de paso de las bandas criminales. «Lo primero es que se vaya un gobierno que dejó que el crimen organizado se infiltre en el país”, destacó.
Por su parte, Daniel Noboa expuso su plan ‘Fénix’ para garantizar la seguridad; un proyecto basado en la vigilancia ciudadana junto al gobierno de Israel, el establecimiento de una Central de Inteligencia, así como la creación de cárceles en barcos para aislar a las personas detenidas o el escáner de los puertos ecuatorianos.
Según los analistas, el debate pudo haber sido crucial para definir el voto de los indecisos o formalizar el del electorado más fiel. Un cara a cara que se dio luego de que el pasado domingo arrancará la campaña electoral del balotaje que determinará quién ocupa el Palacio de Carondelet y reemplazará al presidente Guillermo Lasso hasta el 24 de mayo de 2025, fecha en la que se celebrarán las próximas elecciones.