La alcaldesa Diana Caiza logró atender un anhelo ciudadano con la actualización del PUGS, aprobada por el Concejo municipal. Los graves errores cometidos en materia de desarrollo urbano en la anterior administración, cuando se aprobó el PUGS, han sido corregidos. De este modo, los derechos de la mayoría de ambateños han sido reivindicados.
En efecto, la prohibición absurda de construcciones cerca de quebradas ha sido eliminada. Igualmente, los usos de suelo prohibidos, han dejado de estarlo. Los artesanos y los gestores de actividades sociales ya no tendrán que cerrar sus negocios lícitos. La posibilidad de crecer en altura será un incentivo para la inversión en la construcción.
En la actualización trabajaron, en coordinación con la Dirección de Planificación, representantes de gremios profesionales y equipos universitarios de las facultades de Arquitectura, como la de la Universidad Indoamérica, que, inclusive, participó en mesas ciudadanas y, al final, validó los asuntos estrictamente técnicos de la actualización del PUGS.