A las 09:30 horas de ayer, los guías penitenciarios alertaron que dentro de la celda 6, pabellón 3, un reo estaba sin vida. Lo encontraron suspendido con una prenda de vestir. Las autoridades presumen que es suicidio.
En el momento que acudieron los agentes a revisar la celda, se percataron que se trataba de Julio Rosero de 55 años. El interno purgaba una condena de 26 años de prisión por asesinato.
El crimen
En el mes de julio del 2005 el hombre ofuscado por los celos fue a casa de su expareja, para pedirle una nueva oportunidad y regresar nuevamente a casa. La mujer de 38 años se negó y Julio tomó la peor de las decisiones. Encerró a la mujer e hija de 14 años, les rocío gasolina en el cuerpo y después las quemó vivas.
El aterrador hecho se registró en la comunidad El Santuario de Quero. El hombre huyó y pasaron 12 años para la captura. En el 2017 fue llevado a los estrados donde el Tribunal Penal lo sentenció a 26 años de cárcel. Cinco años pasó privado de la libertad y ayer lo encontraron sin vida, dentro de la celda.
Fuente: El Heraldo
